Interacción entre los suelos orgánicos y la geotécnia: comportamientos y desafíos

La interacción entre suelos orgánicos y la geotecnia es un tema de gran importancia en el campo de la ingeniería civil y geotécnica. Los suelos orgánicos son aquellos que contienen un alto porcentaje de materia orgánica, derivada de materia vegetal y animal descompuesta. Son de color oscuro y estructura porosa/ migajosa/ fibrosa, debido a condiciones como la alta humedad y el bajo nivel de oxígeno que ralentiza el proceso de descomposición y conduce a la acumulación de materia orgánica con el tiempo. Los suelos minerales difieren de los suelos orgánicos al tener mayor concentración de partículas minerales como grava, arena, limo y arcilla.

 

Los suelos orgánicos en la clasificación S.U.C.S se establecen los tipos: OL, OH y Pt (turba) caracterizados por su plasticidad baja a alta. Estos tipos de suelos muestran propiedades geomecánicas como: alta compresibilidad, baja resistencia al corte, alta capacidad de retención de agua y alta permeabilidad, que pueden variar ampliamente según su composición, grado de descomposición y condiciones ambientales.

Los suelos orgánicos pueden dificultar el trabajo en proyectos de ingeniería, ya que afectan directamente a:

Mayor compresibilidad y asentamiento: se descompone con el tiempo y se consolida.

- Menor resistencia al corte: reduce la fricción y la cohesión entre partículas.

- Mayor permeabilidad: tienen estructura fibrosa y porosa.

- Cambios volumétricos en ciclos de humectación y secado: son capaces de retener o liberar agua.

- Inestabilidad y colapso de taludes: baja resistencia al corte y alta compresibilidad.​

 

Estos desafíos requieren un enfoque especializado en la geotecnia. Es necesario realizar una caracterización exhaustiva de los suelos orgánicos para comprender sus propiedades y comportamientos. Esto implica la realización de ensayos de laboratorio y pruebas in situ.

Con base en esta caracterización, los ingenieros geotécnicos pueden desarrollar estrategias de diseño y construcción adecuadas. Esto puede incluir el uso de técnicas de mejora del suelo, como la estabilización química o la compactación controlada, para aumentar la resistencia y reducir la compresibilidad del suelo orgánico.

 

En conclusión, la interacción entre suelos orgánicos y la geotecnia presenta desafíos significativos en el diseño y la construcción de infraestructuras. La comprensión de las propiedades y comportamientos de los suelos orgánicos es crucial para garantizar la estabilidad y la seguridad de las estructuras. Con una adecuada caracterización y técnicas de mejora del suelo, es posible superar estos desafíos y lograr soluciones geotécnicas eficientes en terrenos con suelos orgánicos.